"La práctica médica no entraña solamente tejer, entretejer y tener activas las manos, sino que debe inspirarse en el alma, estar plena de conocimiento y tener como componente preciado la observación aguda y minuciosa; todo ello, junto con los conocimientos científicos exactos, son los requisitos para que la práctica médica sea eficiente."
Moisés ben Maimón (1135-1204)

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martes, 26 de enero de 2016

Resumen: Modificación de estilo de vida: pasos sencillos para todos los pacientes.

Evitar la generalización de las dietas suele dar resultado. El paciente requiere una historia clínica estricta sobre hábitos nutricionales, como se hace con los factores de riesgo. Desde la infancia hasta el momento actual.


Abandonar las dietas de kcal, desmitificar las dietas de moda, el efecto de la publicidad, entre otras, es una buena política.

Un buen consejo es convenir con el paciente en escribir un diario de comidas, sitio donde come, si puede elegir menús, horarios, viajes entre otros.

Ajustar kcal en función del gasto calórico basal y el añadido por el ejercicio físico que realice.

Diversos estudios observacionales han puesto de relevancia el beneficio de la llamada "dieta mediterránea", es decir, una dieta rica en frutas y verduras, con una gran presencia de pescado y aceite de oliva, así como una ingestión moderada de vino y cerveza. Evitar alimentos preparados y precocinados. El consumo de pescado es recomendable, pero no se debe abusar de algunos depredadores del mar (atún, pez espada) por poder inducir una acumulación de mercurio plasmático, sobre todo en embarazadas y niños.

Para todas las edades, las guías ACC/AHA de 2013 recomiendan dos horas y media de ejercicio físico de intensidad moderada a la semana, o 75 minutos a la semana de ejercicio físico aeróbico deintensidad elevada, o una combinación de actividad física aeróbica de intensidad moderada y vigorosa. Cualquier aumento en la cantidad de ejercicio resultará benéfico -incluso antes de que la pérdida de peso sea evidente. Es recomendable realizar actividad física en episodios de al menos 10 minutos, repartidos de preferencia a lo largo de la semana. Existen unos cuantos consejos que pueden fomentar el aumento de la actividad física.

Estos consejos son:

  • Caminar es una forma excelente de hacer ejercicio - no es necesario correo o practicar un deporte para conseguir efectos benéficos.
  • La jardinería u otras aficiones lo suficiente activas pueden ser igualmente benéficas.
  • Es recomendable incorporar a la rutina diaria el subir y bajar escaleras, en ves de usar los elevadores.
  • Las tareas del hogar, como limpiar las ventanas o pasar la aspiradora, pueden ser igual de efectivas que hacer un ejercicio físico moderado.
  • El podómetro resulta una herramienta útil para contabilizar el número de pasos que se dan al día para el logro de los objetivos propuestos.

Decálogo de consejor para mejorar el manejo del paciente con hipertensión:

  • Desarrolle una buena alianza entre médico y paciente.
  • Asesore a todos los individuos con riesgo o con enfermedad cardiovascular manifiesta.
  • Ayude a la persona a comprender la relación entre su comportamiento y su salud.
  • Ayude a identificar las barreras para el cambio de comportamiento.
  • Consiga un compromiso dela persona sobre el cambio del comportamiento.
  • Invite a la persona a participar en la identificación y selección de los factores de riesgo que se deben cambiar.
  • Use estrategias combinadas, incluído el referzo de la capacidad personal de cambio.
  • Diseñe un plan de modificación del estilo de vida.
  • Siempre que sea posible, involucre a otro profesionales de la salud.
  • Monitorice los progresos mediante contactos de seguimiento.

BIBLIOGRAFÍA

  • RIESGO CARDIOVASCULAR. Guía para mejorar el tratamiento y mantener el apego al tratamiento. Michael Kirby. Global Medical Communication. Edición en español 2015. ISBN: 978-1-907418-21-1.

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